
-Los traidores: excelente. Es sobre la traición de los sindicalistas peronistas, los burócratas, centrada en la figura de uno que, indudablemente, es Rucci. Está muy bien el efecto de la musiquita de circo cuando aparecen los sindicalistas "defendiendo" a "los compañeros", entre otros detalles.
-La tierra quema: sobre la vida en el NO del Brasi, en los '70. Debe seguir igual o peor. Muy contundente cómo se transmite la experiencia de la sequedad agobiante.
-Me matan si no trabajo y si trabajo me matan: documental sobre Insud, una empresa en la que se trabajaba con plomo y que enfermó de saturnismo a 79 de 81 obreros. Algunos habían muerto para cuando se hizo el film. El médico de la fábrica no les decía realmente lo que mostraban los análisis y los mandaba a laburar de nuevo, hasta que uno de ellos le lleva los estudios a otro médico que le dice algo como "Vos no estás enfermo, vos estás podrido", al ver los niveles de plomo de su sangre...¡o a ver al jefe de personal si se seguían sintiendo mal!, jefe que obviamente...¿Qué habrá sido de esos obreros? Uno de los que habla, entiendo que es un delegado, cuenta que estaba amenazado de muerte (creo que la película es del '74), que dormía en lugares distintos cada vez; que otros también estaban amenazados. De acá también me gustó mucho el canto, que ¿está hecho ad hoc?, y por uno que no canta profesionalmente, canta "mal", pero del mismo modo en que Arlt escribe "mal" y es genial.
-Ni olvido ni perdón, sobre los fusilados de Trelew. Me impactó verlos hablando a Bonet y a Pujadas. Leí decenas de textos sobre este episodio pero a lo sumo había visto fotos desvaídas; acá se los ve bastante bien, para tener el material el tiempo que tiene: son imágenes de los noticieros de la época, de la transmisión desde el aeropuerto, una vez que habían logrado escapar los 6 y quedaban los demás, que luego serían en su mayor parte rematados a los pocos días. (Acá la entrevista, fragmentos, creo, de Paco Urondo a los tres sobrevivientes (luego asesinados también)
Y di con una "Milonga del contrapunto", de Zitarrosa. Dura más de 7 minutos, pero al irla escuchando me pareció una payada, si no espontánea, ¿semi?; pasados varios minutos, le retruca otro, que no sé quién es, y se corta repentinamente antes de llegar al minuto 8. Fragmentitos:


"(...)
no hay más patria para mí.
En este suelo crecí,
como mi padre y mi abuelo.
Pero hoy estamos de duelo,
milonga, y hasta el más potro,
al ver el dolor del otro,
se ablanda aunque sea un momento.
Para mí no hay sufrimiento
más grande que entre nosotros.
(...)
Hay una cosa evidente
y hay que decirlo también:
el que manda sabe bien
cómo engañar a la gente.
El que me juzgue imprudente
por hablar de estas cuestiones
que analice las razones
que le va a dar el que canta.
(...)
Si yo no tengo razón
que me lo diga la gente.
Hemos visto al presidente
hablar por televisión.
(...)
dijo que había unos locos
que son malos pero pocos
y se la tienen jurada.
Nunca ha hablado de nosotros,
sino de la subversión.
No dice nada del pión,
del medianero tampoco.
El piensa que con la foto
que le publican los diarios
se asustan los adversarios,
el obrero, el estudiante,
que la gente es ignorante,
que él es un visionario.
Mientras los campos se agrandan
él sigue poniendo el pecho,
atropellando el derecho
y contratando guardaespaldas.
Si al que tiene que yugarla
no le gusta el Pachequismo,
se aumenta para el turismo
la carne a quinientos pesos
y ha de ser tal vez por eso
que un dólar vale lo mismo.
Nadie puede “especular”
excepto los oligarcas;
ellos engordan sus arcas
y la gente a trabajar.
Nos han obligado a odiar
a los vivos por los muertos,
y aunque es muy triste es muy cierto:
mientras faltan hospitales,
en la “casona de Suárez”
hay piscina y helipuerto.