-me causan gracias los cuestionamientos al Mundial como alienante, como herramienta del sistema para ocultar conflictos tales como la miseria, la creciente brecha social, los planes económicos salvajes...claaaaaro...porque cuando no hay Mundial, hasta el día antes, mirá, somos todas personas críticas del sistema, combativas, dispuestas a dar la vida por la justicia y la fraternidad, prontas a ejecutar la revolución ya-ya. En cambio, che, el día que empieza el Mundial, unos señores malísimos y maquiavélicos ponen el modo "activar alienación" y entonces de un día para otro, abandonamos nuestra lucha por un mundo mejor, dejamos que los oprimidos se las arreglen como puedan con el sistema, y nos idiotizamos frente al televisor -unidos , eso sí, porque ahora somos todos argentos, todos, el gerente que gana 30 lucas y el ordenanza que vive en la prefabricada en González Catán, ¿ven cómo nos une el mundial?- y nos olvidamos del compromiso con la justicia, que horas antes teníamos irrenunciablemente metido hasta los tuétanos...Berp...
-el otro asunto es que, sin hacer lecturas paranoicas, lo que no me gusta del mundial es cómo expresa y muestra como "naturales" cosas que tranquilamente podrían ser de otro modo, pero "son así", son "naturalmente así", entonces, son fatales, inevitables...algunas situaciones del mundial podrían describirse con frases que también pueden aplicarse a la mirada sobre la realidad, sobre este sistema, que se nos va configurando a través de tantos mecanismos del poder:
"Y es así, algunos llegan, otros no llegan"
"Unos *tienen que* ganar y otros *tienen que* perder"
"Estamos en igualdad de condiciones, el partido empieza cero a cero, ganará el mejor, meritocracia pura"
"Y bueno, todos no pueden ganar."
Es políticamente incorrecto y no se dice así, pero ¿de qué otro modo leer la "eliminación": "Y bueno, sobrevive el más apto, los débiles, afuera."
Todo eso me parece una reverenda bosta. No me parece que el fútbol tenga la culpa de ninguna alienación, simplemente que refleja la ya existente, la que impide pensar otras cosas.Y me hace acordar que de adolescente me quedé con las ganas, por unos centavos ,de comprar un libro que se llamaba algo así como "juegos no competitivos". Porque la idea de que "naturalmente" unos "tengan" que ganar y otros que perder no me va ni un poco. Y que "ganar o perder" sean las únicas alternativas para jugar, para divertirse, para vivir, me parece una basura...Ahora, los goles del seis a cero, una joyita muy disfrutable ;-)
9 comentarios:
¡Gracias por la visita! Y muy bueno volver a leerte...
Me encantan los deportes. Y, de verdad, me parece que no siempre gana el mejor. Y además, ¿quién es el mejor?... A veces está claro y otras veces no. Muchas de las últimas finales de tenis, podría haber ganado uno como el otro.
Pero, igualmente, me encanta el deporte en donde uno gana y otro pierde. Y si gana, en estos casos, mejor porque sigue jugando. Y si pierde, mala suerte. Uno de los dos iba a perder.
Y no creo ser la única que mire el deporte así. Hay de todo.
Y el partido del otro día ¡precioso! (el de Servia), pero no podemos pretender que sean todos así. Dar gracias de haber visto ése.
Ojo Marina, no hay que pelearse con la realidad, siempre hay mejores y peores y eso es bueno que así sea...
Sebastián, (no puedo entrar a tu blog...) el problema es que mucho de ese "HAY" mejores y peores da por descontado que no puede ser de otro modo; que es "natural"; yoculta esta pregunta interesante: ¿por qué "hay" mejores y peores en algunos dominios? Porque en el caso que más conozco, la docencia, claro que hay "mejores" y "peores" alumnos; pero tiene que ver en no sé qué medida ¿con la genética, si nos ponemos deterministas? Y tiene muchísimo que ver con las condiciones de partida, con las desigualdades de base, en las cuales los "mejores" y "peores" no tienen ni mérito ni demérito, simplemente las ligan, las reciben ya hechas. Yo estoy por la meritocracia, no soporto la deformación demagógica de la democracia que no quiere que nadie sobresalga, que nivela para abajo para que nadie se sienta "discriminado"; pero como decía Jauretche: "Emparejá y largamos". Y ¿pelearse con la realidad? ¿Por qué no? , depende con qué faceta de la realidad: pelearse con la realidad es lo que hacen los que inventan vacunas, los que reconstruyen ciudades después de un terremoto, los que vuelven a rendir una materia después de un cero, los que quieren ser santos pese a conocerse tanto, los que piden perdón después de mandarse una cagada, para no lastimar irremediablemente un vínculo...en definitiva: los que quieren modificar algo de lo dado.
¡Vamos Argentina! pero no se pongan insoportables....por favorrrrr :)
Franca, ¡qué requetebueno saber de ti!
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Marina, no podés entrar porque no tengo blog. Opino que a la realidad hay que modificarla sí, a contracorriente incluso la mayoría de las veces, pero nunca pelearse, pues nos vamos a volver ideológicos. Debemos contemplar las cosas como son, y como nos gustaría que sean, sólo soñarlas (y tratar de realizarlas, lógico). Es un dato de observación inmediata que los hombres son desiguales, tanto por los condicionamientos que reciben del entorno (que es lo que se puede y se debe modificar) como por los talentos y falencias naturales. Yo nunca voy a exigirle al líder de mi equipo que me considere en pie de igualdad para jugar al fútbol, ya que de hecho no lo merezco. Así, aplicalo a todas las cosas de la vida. No quiero caer en diatribas contra liberalismo, comunismo, etc, pero esto es lo que hacen, a su modo, estas ideologías. Mirémoslo en la educación. La eduación uniformizante es injusta para con las personas, porque no considera justamente las aptitudes particulares de cada de una de ellas, y, esto lo debés saber mejor que yo, siempre el más apto recibe menos de lo que merece y el menos apto aprehende (ojo, con h) menos de lo que podría recibir.Está muy bien buscar la igualdad, pero al modo de aristóteles "igualar a los iguales en lo que tienen de iguales y a los desiguales en lo que tienen de desiguales" (o algo así).
Si la igualdad total es una utopía y es malo buscarla, ojo también con la meritocracia.
Entiendo lo justo que tiene la meritocracia, lo entiendo. Pero si profundizamos un poco más, más que meritocracia vale la "amorcracia".
La meritocracia esta unida a la justicia. La "amorcracia" a la misericordia.
Si es por méritos, los que nos salvaron son los de Nuestro Señor Jesucristo.
(Esto se fue muy lejos del tema específico de la entrada).
Ha perdido Argentina y lo siento mucho :(
para otra vez será, pero si no va Chile, jejeje
Juan Ignacio, ¡qué buen comentario aunque te hayas ido lejos! Saludos a todos
No me gusta por 3 cosas:
1ro Ahora tooooodo el mundo es alegremente Nacionalista. Cuando el País los necesita bien que se limpian el orto con la bandera Argentina (me enferma eso... mal >:( )
2do Es una excelente excusa para que todo el mundo salga a currar vendiendo un pedazo de tela mal cosida por 25$ >:( Me saca el comercio que carga monetariamente de manera injusta y no correspondiente al producto vendido.
3ro Perdió Alemania. Todo mal.
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